No estoy dispuesta
Verás me he cansado de menospreciar mi tiempo, mi bondad y mi dulzura a personas que solamente te dan atención cuando les interesa, cuando te ven como algo fresco. Cuando eres la novedad.
Sí, como cuando ves en un escaparate una prenda que te hipnotiza. La ves, te nubla la vista y los sentidos y quieres poseer-la; así que decides comprarla. Una vez te la has comprado ya puedes prescindir de ella, los primeros días, las primeras semanas e incluso los primeros meses no te olvidarás de que la tienes en tu armario. Te encantará y te sentirás a gusto con ella. Después te acostumbrarás a que la tienes y le restarás importancia y prioridad.
Pues a eso me refiero. Me he cansado de personas que no tienen constancia, que se acomodan o que sólo son caprichosas y por eso pierden el interés rápido. Un día parece que te tengan presente y que estén dispuestos a darlo todo por ti y otro parece que no hayan vivido ninguna vivencia contigo.
FIN.
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