RELATO: Conocerte no entraba en mis planes.

Eres magia, eres esencia. Quiero que lo sepas, que notes que te estás volviendo indispensable para mí, porque sin conocerte lo que más anhelo y deseo es conservarte. Estás encendiendo la luz que otros apagaron, me estás restaurando el alma... Eres precioso. Y creo que no tienes consciencia de lo mucho que lo eres. Precioso porque has llegado a mi vida para darle vida. Que irónico ¿no? Pero así es, me mueves, me haces temblar, vibrar de emociones que viajan y recorren mi interior. Mis pupilas se dilatan cuando te miro, y cada día que lo hago, lo hago como si fuese la primera vez... Con curiosidad e ilusión. Y me he propuesto sacar lo mejor de ti, que incluso seas mejor persona de lo que eres, que encuentres tu calma. Me he propuesto que me quieras, querernos, quiero endulzarte la vida. Contigo he levantado barreras, he dejado atrás prejuicios pero porque pienso que puedes llegar a ser lo mejor para mí y quiero comprobarlo. Comprobar que la vida y el destino se equivocan, pues aún hay alguien en este mundo capaz de entregarme su amor, que me reconforta. Que aún hay alguien en este mundo incapaz de hacerme daño, alguien en el mundo que sólo anhele y deseé besarme las heridas y cicatrices que otros me causaron. Estoy apostando por ti, porque tus brazos me calman, encuentro la paz envuelta en ellos, y es que quiero y espero que te acabes conviertiendo en mi casualidad más bonita.

Hoy más que nunca estoy empezando a creer y a percatarme de que el tiempo es sabio, y que cuando menos te lo esperas aparece una persona de la nada y te lo cambia todo. Estoy empezando a creer que el tiempo no determina el cariño que le puedes coger a una persona, que las mejores historias son las que suceden de la nada, de manera fluida. La fluidez determina calidad. Y contigo todo es sublime. Con cada gesto me atrapas, me haces tener más sed de ti, de lo que hace que tú seas tú. Me inspiras, y más me inspira que sólo tú lo hayas conseguido. Porque de hecho ya nadie lo hacía... Simplemente cada día me alegro más de haberte conocido, de que existas.